Nunca pensé que viviría para ver un debate religioso. Creo en Dios. Pero creo que en algún lugar de mi corazón. No impongo mi fe a nadie, no la grito en cada esquina. De hecho, ni siquiera creo en Dios, creo en el Todopoderoso. Creo que Dios es uno y nos ama. Sólo que nosotros, el pueblo, lo llamamos de otra manera. Tiene un nombre diferente en cada país y es fundamentalmente erróneo dividirlo en naciones. Pero eso no es lo importante ahora.
Me sorprenden las personas que hablan de fe pero incumplen los mandamientos básicos. Al igual que las personas que piensan que al dejar la carne están ayunando, olvidando los otros aspectos de la abstinencia. Este año conocí a la segunda persona de mi vida en mi viaje que me inspiró el más profundo respeto en este sentido. Esta es una mujer que realmente vive de acuerdo con los mandamientos de Dios, y de ella sale una luz invisible. Me dijo que a sus 45 años, este año va a mantener el ayuno de verdad. Y créeme, no lo mantiene como nosotros, sino como deberían hacerlo todos los cánones. Sorprendentemente, dice que le resulta fácil, que su deseo de ayunar proviene de su corazón y no de su cabeza. Lástima que mi sopa no le guste, pero los que ayunan con la cabeza y no con el corazón seguro que la aprecian.
Ingredientes:
Caldo/agua – 1,5 – 2 litros.
Cebollas – 350 gr (2 cabezas grandes)
Zanahoria – 200 gr. (2 piezas)
Aceite vegetal – 3-5 cucharadas.
Alubias blancas en lata – 450 g.
Perejil verde – ½ manojo
Especias al gusto: sal, pimienta negra, laurel, cilantro, pimienta negra, guindilla.
Crema agria para servir al gusto.
Preparación:
- Pelar la cebolla y la zanahoria, lavarlas bajo el grifo. Cortar las cebollas en medios aros, rallar las zanahorias.
- Precalentar el caldo. Si está en ayunas, sólo use agua.
- Calentar el aceite vegetal en una cacerola. Poner la cebolla en una olla para sofreírla, hasta que esté transparente. Luego, añade las zanahorias. Saltear hasta que las cebollas estén doradas y las zanahorias blandas.
- Cuando el caldo rompa a hervir, pon las alubias blancas de lata y las cebollas y zanahorias fritas.
- En cuanto la sopa rompa a hervir, añadir las hierbas picadas y las especias al gusto.
- Hervir todo junto a fuego lento durante 2 minutos. Retiramos del fuego, ponemos la tapa y dejamos infusionar durante media hora – hora.
- Sirva la sopa con los productos de panadería favoritos y con crema agria si no está en ayunas.
¡Buen provecho!
